El Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), que entró en vigor el 1 de julio de 2020, ha tenido un impacto significativo en la economía y las relaciones comerciales de los tres países.
En 2018, México, Canadá y EE. UU. acordaron la modernización del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que culminó en el T-MEC.
El Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá, ha tenido un impacto significativo en la economía mexicana. Aquí te presento algunos aspectos clave:
Acceso preferencial a mercados poderosos: El T-MEC nos brinda acceso preferencial a uno de los mercados más influyentes del mundo. Esto fomenta la inversión extranjera y el comercio exterior, contribuyendo a una mayor tasa de ocupación laboral y al desarrollo del país.
Eliminación de aranceles: Gracias al T-MEC, se han eliminado la mayoría de los aranceles en productos mexicanos, lo que ha impulsado las exportaciones y aumentado la competitividad de las empresas nacionales.
Inversión extranjera directa: El tratado también ha atraído inversión extranjera directa a México, especialmente en el sector manufacturero.
Sin embargo, también existen retos. Las nuevas obligaciones que México ha contraído a raíz del T-MEC tienen un impacto profundo y transversal en áreas como la laboral. El cumplimiento de los compromisos laborales es crucial para evitar dificultades en la exportación de productos agroalimentarios y garantizar el respeto a los derechos de los trabajadores. Fortalecer el estado de derecho es fundamental para mantenernos atractivos para la inversión extranjera y cumplir con las normativas del tratado.
En resumen, el T-MEC ha sido un paso importante para fortalecer las relaciones comerciales y promover el crecimiento económico en la región de América del Norte.