A lo largo de casi seis años, el Gobierno de la Cuarta Transformación reconfiguró el gasto público para orientar un total de 7.9 billones de pesos a los Programas para el Bienestar y obras públicas de infraestructura que benefician a la población, informó el subsecretario de Egresos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Juan Pablo de Botton Falcón.
En conferencia de prensa matutina con el presidente Andrés Manuel López Obrador, resaltó que avanzan con presupuesto suficiente las pensiones para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores y de las Personas con Discapacidad, el Programa para el Bienestar de Niñas y Niños Hijos de Madres Trabajadoras, las Becas para el Bienestar Benito Juárez desde educación básica hasta nivel superior, La Escuela es Nuestra, Jóvenes Construyendo el Futuro, Sembrando Vida, Fertilizantes para el Bienestar, Producción para el Bienestar, Precios de Garantía, Bienpesca y el programa de Vivienda Social.
Estas iniciativas, dijo, fortalecen los ingresos familiares y reducen de manera histórica la pobreza y la desigualdad social. Los recursos dirigidos a los programas sociales tuvieron un crecimiento real de 131 por ciento en el periodo de 2019 a 2024.
Desde 2019 a la fecha, los recursos se redireccionaron de manera prioritaria hacia regiones marginadas del país, lo que garantizó el derecho a la educación y la salud, además de seguridad y bienestar a la población más vulnerable a partir de una inversión de 2.9 billones de pesos.
Las obras prioritarias de infraestructura suman una inversión de 5 billones de pesos que han impulsado la actividad económica del país, especialmente en zonas de mayor rezago.
La federación rescata el sistema de trenes para pasajeros con la construcción del Tren Maya, el Tren Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, el ramal Buenavista-AIFA del Tren Suburbano y la conclusión del Tren Interurbano México-Toluca, El Insurgente.
En este gobierno se edificó infraestructura aeroportuaria: el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, en el Estado de México y el Aeropuerto Internacional Felipe Carrillo Puerto, en Tulum, Quintana Roo.
En obras de conectividad carretera resaltan los caminos artesanales en Oaxaca y Guerrero, así como la carretera Oaxaca-Puerto Escondido.
La 4T también construyó infraestructura hídrica y obras para la soberanía energética. En este rubro destacan la refinería Olmeca y las plantas coquizadoras de Tula, Hidalgo, y Salina Cruz, Oaxaca; la modernización del Sistema Nacional de Refinación y la compra de la refinería Deer Park, en Texas.
El subsecretario de Egresos puntualizó que la inversión pública es posible por la implementación de una política de austeridad, combate a la corrupción y eliminación de lujos y gastos innecesarios.
Desde que inició el actual gobierno federal disminuyó salarios de altos funcionarios, gastos de operación, costos de viáticos, comunicación social y publicidad. Eliminó puestos con duplicidad de funciones y recuperó fideicomisos. Resultado de estas medidas, el gasto burocrático se redujo 26 por ciento en términos reales al pasar de 80 mil millones de pesos en 2018 a 59 mil millones de pesos en 2024.
En contraste con el sexenio anterior (2012-2018), la inversión social en la 4T tuvo un crecimiento promedio real anual de 5.4 por ciento y en el gobierno previo sólo creció 1.2 por ciento. El gasto en inversión física también aumentó en la actual gestión federal en un promedio real anual de 7.3 por ciento, mientras que en la pasada subió 0.1 por ciento.
El secretario de Hacienda y Crédito Público, Rogelio Ramírez de la O, explicó que la dependencia opera con base en cuatro pilares congruentes con los principios de la Cuarta Transformación: apoyo a ingresos familiares, finanzas públicas sanas, desarrollo regional y reforzamiento de la oferta.
Estas directrices, afirmó, conducen a una planeación fiscal eficiente y responsable que respalda a los hogares más vulnerables mediante los Programas para el Bienestar y el aumento del salario mínimo en 114 por ciento en términos reales.
“Este modelo de equilibrio es totalmente mexicano, es de esta administración. No sigue ninguna regla internacional y ninguna receta; es totalmente hechura de esta administración y con el liderazgo del presidente López Obrador”, enfatizó.
El presidente López Obrador puntualizó que la siguiente administración federal heredará finanzas públicas sanas y presupuesto suficiente a fin de comenzar proyectos y programas sociales comprometidos para la continuidad de la Cuarta Transformación.